Poema de Mag Márquez para Poetílicos Sobrios.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Dice la tele que son chicos malos,
poco menos que vampiros o marcianos.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Lo dice la tele, lo dice la radio,
los políticos y catedráticos.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Ni estudian para estar ocupados,
Ni trabajan para estar empleados.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
No son jóvenes de provecho,
no disponen de su propio techo.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Son una generación perdida,
tras los jasp y la movida.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Viven con los papis de su pasta,
que en botellones y en porros se gastan.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Ay, pobrecitos, dicen los medios,
qué será de ellos cuando falten sus viejos.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Ni-ni no es el hijo del politiquito
porque es de lo más pijito,
ni-ni no es el hijo del banquero
que sin trabajar le sobra dinero,
ni-ni tampoco es el hijo del rey
que cobra paga gracias a la ley.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Hay una cosa que no se ha explicado
hay menos ni-nis que ni-sis camuflados.
Ni-sis, ni-sis,
Ni-sis, ni-sis.
Ni si estudias encontrarás trabajo,
ni si trabajas recibirás un digno salario,
ni si les votas cumplirán su programa,
ni si te esfuerzas vivirás bien mañana.
Ni-sis, ni-sis,
ni-sis, ni-sis.
Dicen los políticos estar preocupados
y por las noches quedarse desvelados.
Quieren convertirlos en emprendedores
de esos que defraudan y regalan comisiones.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Vaya con las copulativas
que no copulan y dan mucha grima,
dos negaciones reiterativas,
con soniquete de sentencia de por vida.
Ni-ni, ni-ni,
ni-ni, ni-ni.
Cacofonía de gran inventiva
ya estoy cansado de tanta retahíla.
Sí-sí, sí-sí,
sí-si, sí-sí.
A mí sí que mi importan
y por eso lo canto,
tanto Gili-caradura ninguneando.
Sí-sí, sí-sí,
sí-si, sí-sí.
Dicen en la tele que son chicos malos,
dicen en la tele que son chicos malos…